Siempre he pensado que el deporte es un reflejo de la sociedad. Ahora más que nunca es fácil de comprobar. Asistimos a diario a la sinrazón y falta de rigor que se impone desde los medios de comunicación, casi la totalidad de los mismos dirigidos por los dueños de los clubes, que crean ficciones interesadas en beneficio propio y en detrimento del rival muy alejadas de la realidad.
En menos de un mes de liga de fútbol. ¿O seria mejor definirla como liga de resultados? Ilustres periodistas, tertulianos profesionales y filósofos del fútbol, acompañados por ex profesionales de este deporte y por una recua de vociferantes y mal educados hinchas y asalariados nos convencen de noticias que dan como primicias y al día siguiente nos convencen de la noticia contraria sin que les aparezca el mas mínimo rubor. El vago y no comprometido jugador al que hay que vender "hoy mejor que mañana", cuando nadie le quiere, corretea unos minutos otra vez en el campo y vuelve a ser el crack por el que se pagarón mas de cien millones. Los mismos que ayer pedían su cabeza en el patíbulo, hoy sin un apéndice de dignidad pregonan que ha vuelto el crack.
Los que se han cansado de agredir con la noticia incuestionable de que en el vestuario de vacas sagradas no querían a un jugador y luego imponían la llegada de otro. Hoy cuando esta el primero y no el segundo en el vestuario, son incapaces de decir públicamente que metieron la pata y que todo fue un invento suyo para mendigar unas migajas de sus oyentes o lectores.
La realidad es que Bale no es tan vago ni tan crack como se dice de él. Y que Messi no decide los fichajes del club aunque seguramente se los comenten antes de realizarlos. La realidad es que tal y como pasa en nuestra sociedad vivimos en el mundo de las fake news. De las mentiras intencionadas dirigidas a la ciudadania para que esta oiga y lea lo que quiere oír y leer indistintamente de lo que sea verdad o no. Vivimos en un mundo en el que se inventa la realidad para tapar precisamente lo que en realidad ocurre. Vivimos en u estado de manipulación permanente para dirigirnos intencionadamente.
En el mundo del fútbol actual las competiciones son importantes en función de quien las gana. Las competiciones que ganan otros sean o no más meritorias no tienen valor hasta que las ganan los nuestros. En el fútbol actual jugadores que no pasan de la mediocridad son alzados hasta la cumbre del éxito, prometiendo de ellos los más altos galardones individuales mucho antes de demostrar en el campo el más mínimo merito. Jugadores avalados por el jefazo de turno que cuestan decenas de millones de euros y que cuando desaparecen tal y como llegaron son inmediatamente sustituidos por otro igual que se vende todavía con más parafernalia para que caiga el anterior en el olvido inmediato. Nadie exige respuestas a los palmeros que vendieron ese gran fichaje de ese gran presidente.
No es tan diferente en politica. Donde cuando un partido hace lo mismo que hizó otro comete la mayor de las indignidades en la misma situacion que antes fue un ejemplo de Estado.
También se utiliza en el fútbol la idea de que el deporte rey esta por encima de todo y no hay que mezclarlo con nada. Asistimos impasibles a las afirmaciones rotundas de que no hay que mezclar el deporte con la política. No deja de ser curioso que el fenómeno socialmente más importante desde el punto de vista cuantitativo tenga que quedar al margen de la vida cotidiana socialmente hablando. Es decir de la política. ¿Diganme por favor que acontecimiento social reune todas las semanas a cientos de miles de personas alrededor de él y a millones de espectadores? Curiosamente he leído la afirmación de no mezclar el deporte con la política a los personajes más políticos de la sociedad. Desde el Generalísimo Franco a Esperanza Aguirre. Desde Jesús Gil a Javier Tebas. Los personajes que más utilizan la imagen del deporte son precisamente aquellos que no quieren que este se mezcle. Estoy seguro que cualquiera de vosotros nombraria una decena de presidentes de clubes con vinculos políticos. Como diría Jesús Gil "soy alcalde pero no hago política". Me imagino que esto tiene que ver al igual que en la politica con el rechazo a hacer negocios particulares en ambos espacios. Aunque la realidad sea tozuda y nos demuestre dia a dia como se hacen millonarios algunos gestores de los dos ambitos.
Resumiendo, en mi opinión el fútbol y la politica esta en manos muy interesadas que utilizan todos los medios que da el prestigio social de este deporte, el efecto mediatico que tiene, el poder y reconocimiento social y los grandes recursos económicos que de el se desprenden.
Y para conseguir todos estos objetivos vale todo socialmente. Control de los medios de comunicación. Control de políticos, jueces, fiscales, abogados del estado inspectores de hacienda cloacas del Estado..... y lo que es más importante los sentimientos de las personas.
El fútbol hoy es un reflejo de la España actual. Y tal y como pasa en nuestra política cotidiana, se despiertan y fomentan los más bajos instintos regionales para mantener viva la llama del enfrentamiento que tape las incompetencias y corruptelas de los que dirigen este cotarro.
Así se fomenta que el rival no es el adversario con el que competir, es el enemigo a eliminar.
Los dirigentes deportivos al igual que los dirigentes políticos están más en el día a día que les garantiza su poltrona que en el bien colectivo del club o de la ciudadania.
Y en tanto en cuanto asistimos atónitos a el desgaste tanto social como deportivo. ¿O no es desafección una sociedad personalista, que retrocede por momentos a estados que nos remontan a hace decenas de años?. ¿O no es un a desafección renunciar al juego a cambio de el resultado aunque este se produzca lamentablemente de forma anodina, fea y aburrida?
En politica y en el futbol todo vale por el resultado. Que gobierne quien ha perdido pactendo con los que a priori no tienen nada que ver con ellos. O buscando y dando por bueno un gol en el ultimo minuto finjiendo un penalty. Y esto es asi porque aceptamos de buena gana que lo unico que importa es que ganen los nuestros.
Así que o nos quitamos a todos estos manipuladores reyes de las fake news de encima, a base de pedirles responsabilidades cada vez que les pillamos en sus mentiras o seguimos dejándoles hacer a su antojo y giramos cada día en la rueda como los ratoncillos que no hacen otra cosa en la vida.
La decisión es nuestra. Por eso es tan importante votar en política y no callar en deporte.
Cuidaros.
