martes, 24 de mayo de 2011

MAYO 2011 SE CUMPLIERON LOS PRONOSTICOS.



Tal y como parecía se ha consumado el rotundo éxito del Partido Popular y el estrepitoso fracaso del Partido Socialista en las elecciones municipales y autonómicas de 2011.



No entrare en detalles sobre los datos en concreto, que son de todos los que quieren conocidos. Con la excepción de Extremadura, la derecha gana todo lo demás. Queda Euskadi y Andalucía creo que porque ayer no estaba en juego, sino ni eso. Aunque es probable que el escenario político cuando se vote en Euskadi permita a Patxi López seguir siendo lendakari.



Que la crisis económica mundial, montada por las fuerzas económicas de la derecha ha sido determinante es un hecho.



Indistintamente del color político en todos los países donde ha habido elecciones durante la crisis económica quien está gobernando ha perdido: En Alemania la conservadora Merkel perdió 60 años después su feudo de Badem-W. En Italia el fascista Berlusconi perdió 20 años después su emblemática Milán. En las cantonales francesas el carismático Sarkozy perdió por 15 puntos con los Socialistas y se quedo a tan solo 9 puntos de la extrema derecha de Le Pen. Y en USA el demócrata Obama que había barrido en sus feudos de N. Jersey, Virginia y New York entre otros, los perdió todos, con tan solo un año de diferencia.



En nuestro País ha pasado lo mismo: Castilla la Mancha, Barcelona, Badalona, Sevilla, Getafe… han caído en manos de la derecha.



Pero creo que haríamos mal en pensar que no hay otra causa que la crisis económica mundial en la debacle socialista.



Permitirme un ejemplo, para mi significativo. Barcelona, San Adriá de Besos y Badalona, son ciudades con el mismo entorno físico y social, separadas apenas unos kilómetros, donde gobernaba el PSC. En Barcelona y Badalona gana el PP por primera vez en la historia. En San Adriá el PSC renueva la mayoría absoluta. ¿Acaso no tiene crisis económica San Adriá? ¿Os acordáis del famoso barrio de la mina: inmigración, delincuencia...? Pues esta en San Adriá.



Digo esto porque me gustaría que nos preguntáramos que más podíamos haber hecho. No comparto que se pierde un partido en el último segundo porque se falla un tiro libre, o que se desciende en la última jornada por la mala suerte de ese dia.



¿Cuantos votos se pierden porque no se cumplen promesas electorales? ¿Cuantos porque no se lidera la ciudad y se deja a otros que asuman el papel que no les corresponden llámense mercados o socios de gobierno? ¿Cuantos se quedan en casa por ofrecer siempre lo mismo? ¿Y por hablar mal del adversario y solo de lo bien que hicimos las cosas en el pasado? ¿Y por repetir casi mimeticamente la candidatura, dando por hecho que no hay otra? ¿Cuantos desencantados por las peleas internas, que no le importan a casi nadie salvo a los que se juegan el poder, dejan el poder? ¿Y por el modelo de partido gerontocratico y funcionarizado, donde cuesta entender que es el Partido y que es el Gobierno cuantos pierden la ideología? ¿Cuantos no votan porque no se identifican con la ideología que se dice defender?



Siempre se ha dicho que para que ocurra un desastre tiene que haber una concatenación de elementos. Perder unas elecciones no es un desastre, forma parte de la imprescindible alternancia de la democracia, como la muerte forma parte de la vida aunque algunos se crean inmortales. Perder como ha perdido el PSOE en algunos sitios si lo es. Bajar el suelo de voto hasta limites insospechados: amigos en la Comunidad de Madrid, con nuestro “Invictus” candidato, hemos obtenido el 24 %, casi diez puntos menos que con Rafa Simancas. Pues veréis como habrá alguna lectura positiva, y lo que es peor, no pasara nada en clave interna. Anoche Pedro Castro anuncio a sus compañeros, después de cosechar el peor resultado de la historia que si se tiene que quedar en la oposición lo hará. Más allá de que no sea verdad, a algunos les pareció coherente y valiente, a otro esperpéntico. Pero lo peor, es lo que pensamos todos: y después de él ¿Quién? ¿No me digáis que no buscamos lo que al final tenemos?



Quiero hablar de Getafe. He de confesar que en este estado no sería objetivo. Quiero ver detenidamente los datos, compararlos con 2007, con los resultados actuales del sur y después escribir. Anticipo que no está todo el “pescao vendido”. Que se equivoca el PP muriendo de gloria por haber sacado un resultado que en condiciones históricas ya tenía conseguido después de tener 11 concejales en 2007. Que UPyD no debería lanzar las campanas al vuelo, porque como dice el refrán una cosa es predicar y otra dar trigo. Ya vivió su particular “guerra de tronos” (por cierto no os perdáis la serie de los lunes en el plus) con las ordenes externas a lo aprobado en su organización local. Espero que no vivamos un “reality show” de aquí al pleno de constitución. Y de la izquierda de este municipio esperamos como dijo Churchill que se conviertan en estadista por comenzar a pensar en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones. Cuando se sale a empatar se suele perder. Quizás esta también sea una razón de porque teniendo 17, se pierde la mayoría. Porque lo que tampoco cuela es lo que dice el ínclito presidente de Cantabria, “la culpa es solo del Psoe”. En Getafe desde luego no.



Cuidaros